Hola a todos
Hemos comenzado una singladura por mar para dar una vuelta
por el Mar Egeo y nuestro punto de partida será Porto Rafti. Llegamos en taxi desde el aeropuerto de
Atenas, un trayecto de 15mt y 22€ y allí
nos espera Javi para embarcarnos en el MissRegina, un velero de acero de
37 pies construido en Canadá y que ya nos ha acompañado en muchas travesías, la
ultima el año pasado por el Mar Jónico.
Por la mañana temprano salimos con la auxiliar a comprar
provisiones, gasoil y todo desde la playa, menos mal que podemos traerlo todo a
la playa en un carrito del super.
Una vez todo estibado, subimos velas y con poco viento vamos
saliendo de la bahía protegida, para evitar las calmas que forman las montañas
cercanas, ponemos un poco el motor hasta que media hora después, con un
viento ya establecido de sureste F3 y que a lo largo de la mañana fue rolando a
suroeste F5-6.
Llegamos a la isla de Kea a las 15h haciendo puntas de 6,5 kn todo
el trapo arriba y ciñendo, entramos en la bahía de Korisia a 20 millas de distancia de nuestra salida y fondeamos
en Livadi Bay, con 5mt de fondo de arena y un pueblecito pintoresco con su
muelle para el ferry.
Por la mañana levantamos el fondeo a las 9h y ponemos rumbo a
Tinos a 40 millas, pasando por el canal entre Tinos y Andros, rumbo Este a
rabiar.
Llegamos a las 18h tras una travesía estupenda de vientos cambiantes y
suaves.
Es de esos días en
los que el mar esta bastante calmado y se puede lucir uno con las viandas, así
que hacemos un asado de patatas, cebollas y salchichas ahumadas que compramos antes
de ayer. Salió riquísimo.
Cuando pasamos entre las dos islas, la corriente en contra
era muy fuerte y formaba olas y parecía que el agua estaba hirviendo. Al doblar el cabo fue la primera vez que
vimos delfines.
Fondeamos en Panormos, y nos quedaremos un par de días para
inspeccionar la isla.
Esta noche bajaremos al pueblo a cenar, y ya os contaré como
son las tabernas por aquí.
Las dos mejores son Marina (para comida griega) y
Maistros (para pescado fresco).
Por la mañana desayunamos y bajamos a tierra a remo, se nos
rompe el conector de entrada de gasolina del fuera borda.
Tras hablar con un griego que estaba sentado en una taberna,
nos recomienda visitar el pueblo de Pyros, hay que seguir la carretera del lado
izquierdo del puerto durante 3 km cuesta arriba, pero merece la pena. Incluso
mientras subimos las vistas son espectaculares.
Por el camino vemos bonitas
torres que se usan de palomares y que son muy
típicas de la isla, aun se conservan igual que hace 200 años, cuando se
usaban para comunicarse dentro de la isla y entre ellas.
Nos encontramos un
típico pueblo griego de casas blancas y ventanas azules, calles estrechas y muy
bien cuidado. Esta isla aparte del turismo, vive del mármol y sus canteras, y
este pueblo esta lleno de artistas, pintores, alfareros, etc.
Entramos en una panadería de 200 años, donde compramos 3
magdalenas y el pan de los próximos
días. Encontramos también una vieja ferretería y nos colamos en busca de
algo para reparar nuestro motor, sin ningún tipo de fe en encontrar nada, pero tras meternos en la trastienda, ya
que el señor mayor solo hablaba griego, encontramos de todo y nos abastecimos de
cosas que ya no se hacen, pero que nos dudarán toda la vida.
Tras visitar el pueblo y tomarnos un refrigerio en un lindo
y muy bien decorado local, emprendimos el camino de vuelta.
Ya cansados de andar, al llegar al puerto, lo que iba a ser
una cerveza se convirtió en una suculenta comida de pescado fresco en una de
las tabernas del pueblo.
Comidos y bebidos, con las piezas para poder reparar las
averías del barco en la mochila, nos fuimos al barco remando de nuevo y
decidimos que ya que la siguiente cala estaba asolo 4 millas, podríamos allí
pasar la noche y reparar el motor y el grifo del baño.
Tras una hora de motor con el viento de 4 kn de cara
entramos en una bonita y desierta ensenada con 4 calas protegidas y sin nadie
ni fondeado ni en tierra. Kolymvithra Bay.
Conseguimos reparar el motor fuera borda y el grifo
del baño.
Aquí Javi se da el primer baño en unas aguas frías y cristalinas,
donde a 6 mt de profundidad se ven todos los detalles del fondo.
Mañana bajaremos a tierra en la auxiliar para inspeccionar un
lago que hay detrás de la playa y la zona.
Por la mañana bajamos a tierra a una cala próxima al fondeo,
donde llega un barranco con pequeña playa y desembocan aguas del riachuelo. Escalamos
un poco la montaña desde donde hay grandes vistas y recolectamos vigaros para
el aperitivo.
Luego vamos a la playa grande donde hay unas cabras pastando
y una especie campamento abandonado, que debe abrir solo en verano con iglesia
incluida. Por cierto, si necesitas agua para el barco, puedes llenar los bidones
en los grifos que estas instalaciones tienen en la terraza.
Ya al medio día cuando el viento comienza a levantarse un
poco salimos de la cala con rumbo a la isla de Mikonos, está a unas 16 millas y hemos
elegido la parte Norte por que tiene un fondeo mas seguro para los vientos de
Sur de 50 kn que vienen en un par de días, y también por que está alejada de la masificación turística de esta isla.
Llegamos a la Bahía
de Panormos de Mikonos, tiene 3 fondeaderos buenos a todos los cuadrantes
excepto Norte. Fondeamos en el primero entrando a estribor, es una playa poco
concurrida con mucho postureo y sin chiringo. En Mikonos se lleva mucho en las
playas, chiringuitos de playa exclusivos, con hamacas privadas en la playa y
música a toda pastilla.
Por la tarde cambiamos de fondeo, ya que por los alrededores
no hay nada y necesitamos provisiones para los días de lluvia y viento que tendremos.
Nos adentramos al final de la bahía y largamos 50mt de
cadena en un buen fondeo de arena amplio.
Bajamos a tierra en busca de un supermercado, de pan y aquí estamos, tras mas de 40 minutos de caminata subiendo
una montaña, a 4 km, encontramos una taberna griega que preparan unos sublakis maravillosos con unas
cervezas. La vuelta cargados con las bolsas de la compra, los estómagos llenos
y la oscuridad del camino, fue divertida y arriesgada.
Por la mañana amanece un día feo, nublado y ventoso. Nos
dedicamos a la higiene personal y del barco, hacemos la comida, unas deliciosas
fajitas de pollo y la ensaladilla que sobró de ayer.
Por la tarde bajamos a
tierra en busca de unas maderas, hemos pensado durante la mañana la forma de
solucionar el problema de la estiba de los 90mt de cadena para que no se atasque
al recogerla.
Cuando bajo a tierra, descubro un bello lugar para jubilarse durante una temporada y
gastar poco, un buen chambao. Volvemos al barco con varias maderas de una obra que
cortamos y encajamos en el pozo de anclas después de un par horas
de duro trabajo, el invento queda solucionado, un doble cajón en el pozo de anclas para almacenar los metros de cadena
añadidos.
Esta noche esperamos temporal de 50kn con un ojo avizor y
otro a dormir, esperemos que el fondeo aguante.
La noche la pasamos relativamente bien, a las dos de la
mañana tuvimos que levantarnos por que la alarma de garreo nos daba una deriva
cada 15 mt, así que zafarrancho de
combate, uno a la caña, otro a la proa y otro a preparar una segunda ancla para
engalanar en la misma linea. De noche cerrada el gps no quería funcionar, por
lo que a ojo fuimos dando avante y recogiendo fondeo para largarlo 30 mts mas
adelante, pero esta vez con una segunda ancla a 20mt de la otra. De esa guisa y
con puntas de 30kn nos fuimos a la cama y todo fue bien. Debo indicar que el ancla principal es una Rocna y colocamos como segunda engalanada a media cadena una Fortress de aluminio.


Ya por la mañana, comenzó
a subir el viento que tubo su punta en los 50kn al medio día. Es
espectacular como el viento es capaz de levantar el agua del mar como si fueran
agua y aire uno solo. El fondeo aguantó
como un jabato. A primera hora de la tarde observamos como un barco de
vela se aproximaba desde fuera de la bahía buscando refugio, cuando llegó a nuestra altura intentó fondear pero tras 3 o 4 intentos fallidos en
los que el barco les garreaba arando la arena pero sin agarrar, se marcharon a
otra cala de esta misma bahía mas al norte. Aquí nos quedaremos hasta que mañana intentaremos
llegar a Andros. El ancla de arado que suelen llevar los barcos de charter por esta zona, no está preparada para tanto viento, en esta ocasion llevaban una Delta con cadena insuficiente
Paso a explicar la configuración del fondeo por si puede
servirle a alguien en un caso como este. Nuestro velero es de acero y pesa 11Ton,
llevamos 90mt de cadena de 10mm y un ancla Rocna de 20kg. En este caso el fondeo
era amplio de arena y el fondo de 5mt.
Largamos la Rocna con 20mt de cadena y se
le enganchó a la misma línea otra ancla Fortress
de 5 kg con 1.5mt de cadena y largamos otros 30mt de cadena. Todo el conjunto
se amarra al barco con doble cabo en la proa y gancho de cadena.
Salimos a las 8 de la mañana con viento del poniente de 10kn
que fue variando entre los 18kn y alguna calma. Las puntas de velocidad
alcanzaron los 7,5kn y al salir pusimos rumbo norte hacia la isla de Andros.
Llegamos a la hora de la comida a la
bahía de Korthion, un pueblecito pesquero en la cara sureste de esta bonita
isla, que aun no está masificado por el turismo y que tiene muchos rincones
bellos.
Una vez comimos y descansamos de la travesía, bajamos a dar
una vuelta por el pueblo, tomar una cerveza, ver sitios del pueblo y comprar algunas provisiones. Descubrimos una taberna con una camarera muy simpática y que
por poco dinero nos dio de cenar.
Al día siguiente nos levantamos pronto con la intención de ver el interior de la isla. Preguntamos a
varios lugareños que nos indicaron unos caminos de senderismo que salen del río
que surca el pueblo y que suben a los pueblos de la montaña. El camino 5 es el
mas bonito, pero también el mas difícil, con cuestas y cientos de peldaños
entre cascadas de agua y casas de campo, iglesias, y arboles frutales.
Cuando
llegamos casi al final de este camino en lo alto de la montaña, nos alejamos de
el hacia la parte este de la isla y llegamos al pueblo de Poyo y allí
encontramos la bajada al puerto por el camino 3, menos difícil, pero mas árido.
En fin una paliza de subir
escalones y cuestas de 4 horas y media, que ha merecido la pena para ver
impresionantes vistas, paisajes y paisanos.
Cuando llegamos al puerto pesquero, paramos a comer en una
tasca que está en el lado izquierdo del paseo y que te ponen bien de comer comida
casera griega, pero caro.
Luego nos vamos al barco a descansar un poco y a preparar la
travesía de mañana, que saldremos temprano a Siros.
A las 8 de la mañana y ya bien desayunados, salimos de Kortion
con un viento de 20 a 22kn del noreste, con un rizo en la mayor y medio génova,
hacemos puntas de 7kn, hay mar de 2 metros, en cuanto salimos de la protección
de la bahía, ponemos rumbo al estrecho que separa las islas de Andros y Tinos.
Al pasar por esta zona vemos unas olas raras que achacamos a
la corriente, pero al acercarnos nos damos cuenta que son atunes comiendo un
banco de peces y las gaviotas están alrededor para ver lo que les cae. Pasamos
el estrecho con viento de popa a orejas de burro y conforme nos acercamos a
Siros el viento decae, pero no la ola que viene de todos lados, haciendo la travesía
incomoda.
Pensábamos fondear en alguna cala de la costa este de Siros,
pero la ola que entraba de noreste era incomoda, al final encontramos una
pequeña cala muy profunda antes de doblar el cabo sur de la isla, que se llama Galisas.
Un fondeo muy tranquilo y que consta de varias tabernas donde comer, aunque
decidimos en esta ocasión comer en el barco unos espaguetis carbonara.
Por la tarde levantamos el fondeo y fuimos al sur de la
isla, en un fondeo muy protegido con puerto, tabernas, supermercado
y náutica. Aquí también hay servicio de
alquiler de motocicletas.
El puerto se llama
Poseidonia.
Por la noche vamos a buscar un sitio para cenar, hay muchas
tabernas en el puerto y alrededores, pero son para turistas, así que comenzamos
a caminar camino de la gasolinera hacia el pueblo de Poinix, y allí encontramos
la típica taberna llena de gentes del pueblo, comimos fenomenal comida típica griega
por la mitad de precio que hasta ahora, recomendable, bien servido y con
simpatía.
Por la mañana antes de salir , bajamos al pueblo a comprar
provisiones y a buscar un recambio de la botella de camping gaz, no la
encontramos, pero en la náutica te la pueden traer de la capital de la isla de
un día a otro. Ya en el barco preparamos
la maniobra del nuevo genaker que habíamos traído de España, pues la travesía
seria propicia para sacarlo.
Salimos sobre las 11h con rumbo a la isla de Kea, ya vamos
buscando el noroeste para acercarnos a nuestro destino, pero intentamos
disfrutar aun de buenos momentos a vela, de calas solitarias, y naturaleza.
La travesía al principio es a motor sin viento y con el mar
como un plato, eso nos ayuda a ensayar varias veces el sistema de arriado y
subida del genaker y comprobar que las modificaciones que le hemos hecho en
puerto para simplificar la maniobra funcionan.
Al rato ya entran 6kn de viento por tercer cuadrante y
sacamos el genaker, luego mas adelante también subimos mayor y hacemos puntas
de 7kn con 10 de viento.
Cuando llegamos a Kea, pensábamos fondear en la primera cala
que estuvimos al comienzo de las
vacaciones, Livadhi, pero al llegar observamos otra cala protegida de suroeste
que es lo que iba a soplar de noche, y entramos a ver Otzias. Nuestra sorpresa, solo un barco fondeado, aunque
luego llegaron otros dos, y un par de
tabernas en la playa, además de bonita y fondo de arena.
Nos quedamos, bajamos
a tierra a dar un paseo y probamos ambas tabernas para ver en cual cenamos. De
las dos recomendamos la del lado de babor de la cala, mejor precio y servicio.
Por la mañana salimos temprano a vela sin encender motor,
estamos ya hechos unos lobos de mar, y ponemos rumbo a Porto Raftis a 20
millas, con viento fresco de suroeste de 15kn, una bonita travesía a vela de
aleta y llegamos antes de comer a fondear a lado sur que se llama Markopolou,
aquí comeremos unos huevos a la cubana y descansaremos para darnos el
último baño en aguas del Egeo de este
año, esta noche volveremos a fondear en
el interior de la bahía de Porto Rafti y
bajaremos a cenar a una taberna para despedir estas maravillosas dos semanas de
navegación por el Egeo .
Mañana nos recoge un taxi para llevarnos al aeropuerto
de Atenas que está a 12 km de aquí.
Un abrazo a todos y buena proa. _/)_